We’ve updated our Terms of Use to reflect our new entity name and address. You can review the changes here.
We’ve updated our Terms of Use. You can review the changes here.

Brujo

by Andrés Sudón

supported by
/
  • Streaming + Download

    Includes high-quality download in MP3, FLAC and more. Paying supporters also get unlimited streaming via the free Bandcamp app.
    Purchasable with gift card

      name your price

     

1.
Viernes y medio, cabalgaba el genio, el árbol longevo del genio quebró. Los enanitos que traen mis canciones se me han enfadado y hacen abstención. Y una manifestación de musas me exige atención. Llevo diez meses sembrando en tachones de tinta canciones que no me dan flor. Mi melodía, ánfora arpía de lento silencio que huele a licor... Y embriagado de creaciones vanas ya soy del montón. Y ya no quiero, cantar solito yo quiero un coro de pajaritos.
2.
Tengo que contarte cosas que ya sabes porque ellas salen solas para que tú las cojas de mi boca, como beso a quemarropa; Tengo que contarte horas sin tocarte porque así se hincha mi dicha cuando pones en mi boca tu beso a quemarropa: Creo en ti, en nosotros, en mí; en la vida que ha pasado, pasa y pasará; en lo que amo, he amado y amaré; en lo que siempre te diré aunque no te cante nada, aunque la tarde ajada no nos deje hablar. Te cuento porque anhelo tu escucha de lucha incesante y relajada, porque anhelo esa mirada que se marcha para siempre volver. Creo en ti, en nosotros, en mí; en la vida que ha pasado, pasa y pasará; en lo que amo, he amado y amaré; en lo que siempre te diré aunque no te cante nada, aunque la tarde ajada no nos deje hablar. Creo en ti, en nosotros, en mí; en la vida que ha pasado, pasa y pasará; en lo que amo, he amado y amaré; en lo que siempre te diré aunque no te cante nada, aunque la tarde ajada no nos deje hablar.
3.
Tengo que contarte cosas que ya sabes porque ellas salen solas para que tú las cojas de mi boca, como beso a quemarropa; Tengo que contarte horas sin tocarte porque así se hincha mi dicha cuando pones en mi boca tu beso a quemarropa: Creo en ti, en nosotros, en mí; en la vida que ha pasado, pasa y pasará; en lo que amo, he amado y amaré; en lo que siempre te diré aunque no te cante nada, aunque la tarde ajada no nos deje hablar. Te cuento porque anhelo tu escucha de lucha incesante y relajada, porque anhelo esa mirada que se marcha para siempre volver. Creo en ti, en nosotros, en mí; en la vida que ha pasado, pasa y pasará; en lo que amo, he amado y amaré; en lo que siempre te diré aunque no te cante nada, aunque la tarde ajada no nos deje hablar. Creo en ti, en nosotros, en mí; en la vida que ha pasado, pasa y pasará; en lo que amo, he amado y amaré; en lo que siempre te diré aunque no te cante nada, aunque la tarde ajada no nos deje hablar.
4.
Voy echando de menos la lasciva memez de sorprenderme en tus dedos sembrando la sed. Voy siendo sólo la sombra en el sol que has traído cuando me lleva en su río mi luna, mi ciudad. Grabaste en mis muñecas el número tres y si mi sangre se aleja te escucho beber. Estoy tan cerca del miedo como tú de mi orilla y nuestra pesadilla la sueño en cada bar. Sentimental y cornudo busqué en tu camisa la risa... y eras yo. ¡Qué calle mi charla, qué vuelva tu diente, qué seamos menos de tres! ¡Qué ya no me ves, te quiero al revés! Por tres calles te busco y en las tres gritaré tres palabras y un verbo: ¡te quiero al revés! ¡Qué calle mi charla... Sentimental y cornudo...
5.
Se siente solo lo sempiterno que lleva dentro de lo más bruto. Cuerdo y enfermo, brillante y enjuto, pupila en luto, anhelo erecto. El rostro infecto, boca de lujo, cantar de brujo que silba el recto, aliento añejo si falta el hilo, arma sin filo, si falta el beso. Llamarlo todo es ser escueto en cualquier uña lleva universos. Jadea inquieto si le han herido, se jacta erguido de estar ileso. Con más de huesos que de sustancia su peso en mierda le cobra el alma. Habita en nadas y olvida el precio de andar al mundo que lleva dentro de lo más bruto: lo sempiterno.
6.
Imaginación 03:22
Sigo cada tarde componiendo la tertulia de las nubes, sigo controlando las miradas que interrumpen mi cansancio, sigo sin seguir su sombra porque descansando no me sé despedir. Y, agudo el oído, escucho al viento silbarme silencios, pero ya no quiero desvirgar al cielo. La imaginación me lleva a ser vela en el mar, y soy barquito y agua y soy cielo y soy gaviota y lucero. Sigo cada luna ingiriendo la palabra de la duda, sigo sin la ayuda de la bruja indigente candilejas. quiero encontrar en el delirio el breve sonido de la verdad. Y torpe el oído no escucho al viento gritarme: SILENCIO. Pero ya no quiero extirpar mi miedo.
7.
Alma azul 04:04
Tu aliento moreno qué dulce se posa en mis belfos impregnando de ocre la puerta de mis secretos. Manada de vapores, delgados emigran feroces al exilio de mi lengua, donde han muerto de viejos más besos. Senectud de gaviotas, salivas que hincharon mi boca, penumbras remotas, mi alma gris se decolora. Desde que besas tú mi alma es azul, desde que abrazas tú. Y el beso es azul moreno. Tu rostro en mis dedos, tu risa escondida en mi cuello, somos puzle de cuerpos vestido de azul y miedo. Se borrarán los cielos, el mar no tendrá su reflejo, huirán por celos al azul que has sembrado en mi pecho. Desde que dices tú mi alma es azul, desde que callas tú. Y el verbo es azul sereno. Desde que lloras tú mi alma es azul desde que ríes tú, y el tiempo es azul y medio Y el fuego es azul.
8.
Los huecos que dejan las palabras en los besos, la boca; el túnel que me lleva al pecho. Busco aquello que... encuentro aquello que... tengo aquello que nadie puede tocar. Tengo las manos llenas de sueños, tengo mis ojos, sus ojos, llenos de luz. Busco aquello que... encuentro aquello que... tengo aquello que nadie puede tocar. Agudo sonido que aturde el oído izquierdo, la nube que llueve en los ojos antes de llorar, la voz del misterio que se pierde en la realidad, lo más parecido al silencio. Busco aquello que... encuentro aquello que... tengo aquello que nadie puede tocar. El número de olas que ha dado hasta ahora el mar, la mejor receta para combatir la tristeza es no pensar y buscar todo que nadie puede tocar y encontrar todo aquello que nadie puede tocar y tener todo aquello que nadie...
9.
Meter una maceta en un cajón es como hablar de la muerte despacio, es mirar a la diestra contento, sin tiento, es amor destetado, ¿Qué lado no quiero si mañana la estiro? ¿A qué querer miro si muero? Ya que espero callado lo hallado es cambiante, lo poco gigante y sudo natillas. Y adiós al cemento del aire que sólo me quiero vivir para hacer requesón con la leche cortada, para verme el risoreo desnudo, para ir a aburrirme en El Viejo, para dar la propina al Diablo, para entrar en el interactivo parloteo infinitivo que a ratos me gusta soltar, para ser la cuestión o no ser, para hablar de las viejas mentiras, para hacerme un abanico con las tiras del vestido que te sobra, para ser una zorra buscando gallinas, para curarme las anginas, para echarte de menos -cabrona-, para hacer alguna broma, para, por, según, sin, sobre, tras, la vida que has dejado se va... Ah, Mariposa Gutural. Ah, Mariposa Gutural. A la hora de la lluvia somos uno, somos sombra, no se asombra si se asoma a lloverse mi nariz (el patio de mi casa es recticular y como siga lloviendo se va a resquebrajar) ¿Qué lado no quiero si mañana la estiro? ¿A qué querer miro si muero? Ya que espero callado lo hallado es cambiante, lo poco gigante y sudo natillas.
10.
De otoño 08:06
Cada verano derramo mis sienes en lagos callados y viejos, en noches de sombras amenas, en llamas obscenas de efímeros fuegos, en juegos con gente que gana o no juega, en besos sin alma, en versos que vuelan... Y al alba, en la puerca calma, recuerdo que no soy nada. Echo de menos el viento que despeina al parque. Echo de menos las hojas marrones crujientes y al indigente que a mi locura le pide un duro que no le cura. Cada verano el hedor del silencio infecta mi sangre de anhelos y vacío y sin consuelo decoro mi boca con besos ajenos; a cambio de sueños regalo saliva, me cuelo en su vida sabiendo mi huida. Y gira, la tierra gira, y nadie se cuela en la mía. Echo de menos la lluvia que moja el invierno, Echo de menos el frío que azota mi voz. Y tengo un antojo: que llegue el Otoño con su manto marrón. De Otoño es la calle amarilla, marrón y lasciva, onírica y lenta donde el viento se lamenta y vomita y crepita la bruta tormenta. Nostalgia De Otoño. de augurios de invierno, que acabe el verano y se apague este infierno. Que acabe...

credits

released March 10, 2000

license

all rights reserved

tags

about

Andrés Sudón Madrid De Los Trillos, Spain

contact / help

Contact Andrés Sudón

Streaming and
Download help

Report this album or account

If you like Andrés Sudón, you may also like: